Como bien sabéis, hace cuatro días, por fin, defendí mi tesis doctoral tras tres años de doctorado y uno de máster cargados de aprendizajes, risas y lágrimas, aciertos y fallos, éxitos y fracasos, sorpresas y decepciones...
No os voy a mentir. El camino no ha sido fácil: estar a 900km de tu familia, pagando de tu propio bolsillo el alquiler, las matrículas, la comida... quedándome sin salir con los amigos por no gastar más dinero o por estudiar un rato más por si en un par de meses estaba de vuelta en casa de mis padres sin poder continuar el doctorado. O trabajando en un restaurante desde las 13.00 hasta las 3.00 de la mañana sin parar para volver al día siguiente a las 12.00 a empezar otra vez a la par que me denegaban la FPU dos años seguidos. No os quiero aburrir haciendo un listado de problemas porque a fin de cuentas todos los tenemos, y estoy seguro de que tú que me lees sabes de lo que hablo porque has pasado por otras situaciones igual de difíciles.
El caso es que todo esto me ha servido para aprender a valorar más cada día que he podido estar en Barcelona, y ya no os puedo contar de lo que supuso haber defendido la tesis y que el presidente del tribunal me dijese: "Enhorabuena Enrique, ya eres doctor con una calificación de excelente". Os podéis imaginar mi cara (y si no, os dejo un breve resumen en el vídeo de aquí abajo). En ese punto final que supuso el cerrar una etapa pude ver todos esos recuerdos de cuatro años pasar por delante de mí, y no pude evitar sonreír. Sí, es cierto que no ha sido fácil. También que no ha sido idílico, que he tenido que luchar mucho. Pero aún así puedo decir que ha sido perfecto. Y lo ha sido porque si algo he aprendido (o recordado, porque en realidad esto ya lo sabía) durante esta última semana, es que con esfuerzo todo se consigue. Y no tienes más que mirarme a mí, un chico de 27 años recién cumplidos que no es ni demasiado listo ni demasiado guapo, al cual no le han regalado nada; pero que ha conseguido llegar a donde realmente quería. Y si yo he podido, tú puedes. Ya se trate de hacer un doctorado, de sacarte unas oposiciones, de hacer una maratón, o de hacer tu propia galería de arte.
Tampoco pretendo dar lecciones magistrales de autoayuda. Tan solo quiero hacer ver que aquello que de verdad me llenaba, aquello que auténticamente me hacía ilusión y que me seguía removiendo por dentro pese a todas las decepciones y problemas era mi auténtico objetivo, pasase lo que pasase. Y así ha sido. ¿Si ha merecido la pena tanto esfuerzo? Pues hasta ahora solo puedo decir que sí, el tiempo dirá si en el futuro mantengo esta opinión (por mucho que haya tenido momentos de estar a punto de dejarlo). Ten claro que tendrás que hacer sacrificios (personales, emocionales, mentales...), pero si es por conseguir tu objetivo más profundo, lo conseguirás.
Y es que si los contratiempos han sido grandes, los aprendizajes y los buenos recuerdos han sido gigantes: desde llegar a Barcelona perdido y en tres meses estar chapurreando catalán enseñando a chicas y chicos jóvenes en un bus turístico la universidad; hasta haber hecho una maratón cuando empecé a hacer deporte tan solo un año y medio atrás. Pasando por esas cervezas con los compañeros en el bar de la universidad, las ponencias en congresos, los primeros artículos publicados, las confidencias, las risas, los viajes, los reencuentros con los amigos, ver cómo el proyecto ebaes va creciendo como si fuese tu propio hijo (gracias a vosotros), las salidas en bicicleta con las increíbles vistas de Barcelona... todo eso quedará grabado por siempre en mi memoria y ya forma parte de lo que soy y lo que ha supuesto convertirme en doctor.
Y todo esto viene porque hoy os quiero dar las gracias. Gracias de verdad, las gracias más sinceras que nunca te hayan podido dar. Si lees esto, da igual si eres un amigo mío de toda la vida, un conocido de mi ciudad, un suscriptor del blog o simplemente una persona que ha pasado por aquí. Te quiero dar las gracias, porque como dije ayer, para mí ya eres parte de mi familia al haber estado aquí durante el tiempo de mi tesis doctoral. Y por eso, ya estás en mí, y queramos o no eso ya no se puede cambiar. Así que gracias por formar parte de esto.
No quiero entretenerme más. Os dejo el vídeo del último diarioebaes en el que os cuento cómo fue justo el antes y el después de la defensa.
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Muy buen articulo Enrique gracias por compartirlo. Una duda ¿has escrito en relación a las FPU/FPI? Es q mi directora me dice q no puedo solicitar beca porque en nuestro departamento hace tiempo que no sale ninguna plaza... ¿entonces que beca solicitar para dedicarte a la investigación? No lo entiendo... abrazos y no nos abandones en Chile ;)
ResponderEliminarHola Francisco, gracias a ti por leerlo!
EliminarSobre tu duda, en principio lo de pedir una FPI o FPU no tiene que ver con que haya plazas o no de profesor en tu departamento... digamos que la FPU o la FPI es como "crear" una plaza artificial temporal para ayudar en tareas de investigación y docencia durante los años que te dure la beca; sin que sea necesario que salga una plaza ya que eso va por otro lado y suelen ser ya para doctores.
En cuanto a post sobre los FPU y FPI, tengo bastantes, búscalos en el buscador del blog que tienes aquí a la derecha. Te dejo un par para que veas:
-http://www.ebaes.es/2016/07/requisitos-becas-fpu-fpi.html
-http://www.ebaes.es/2016/12/minilibro-guia-becas-fpu.html
Saludos!
Doctor: Excelente los aportes. Inéditos.Que sigan los éxitos!!!
ResponderEliminar¡Enhorabuena por haber conseguido el título de doctor (que no es poca cosa)! Aunque claro, supongo que la etapa de postdoc no es mucho más fácil...
ResponderEliminarAl final tras no conseguir la FPU, he conseguido una beca ofrecida para doctorandos de mi comunidad (Galicia), por lo que he empezado con un poco de emoción este mismo camino.
Y evidentemente seguiré visitando este sitio, por todo el apoyo y la información útil para un doctorando que ofreces. Gracias por ello con mis mejores deseos para el futuro.
Hola Pablo, primero muchas gracias por escribir y en segundo lugar enhorabuena por esa beca de Galicia. Da igual que no sea la FPU, lo importante es conseguir financiación y que ahora aproveches bien los años de doctorado. Lo que necesites, no tienes más que escribir...
EliminarSaludos y gracias!